Preso melancolia

Tesoros que se acomodan placidos en nuestro rugoso horizonte gris, estremecen, moldean e inquietan la piel. Van para adentro pero dejan un punto en el exterior que al roce de la brisa del tiempo se inquieta, se pone nervioso y se vuelve melancolía.
Melancolía te acompaña
Entonces el punto se vuelve flor para llevar en el ojal y así empezar a notar de una vez que el recuerdo te cambio para siempre, ahora hay que jugar.
Hombro al frente y a seguir.
Cuantos puntos están invisibles esperando al viento?

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